CRÓNICAS Y REPORTAJES

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Viernes, 18 de enero de 2013

COMIDA SOLIDARIA EN
LA COCINA ECONÓMICA

     Como todos los años, numerosos Caballeros y acompañantes de la Orden de Caballeros de María Pita acudimos a los locales de la Cocina Económica de La Coruña que, como todos sabemos, tiene sus cocinas y comedores en la calle Juan Canalejo de nuestra ciudad, desde hace más de cien años.

     Esta Benéfica Institución tuvo su inicio en la Reunión Recreativa e Instructiva de Artesanos de La Coruña, cuándo sus socios más representativos consultaron al Gobernador Civil, D. Teodoro Baró, la necesidad de atender a tantos menesterosos como había en la ciudad. La idea es bien acogida por la autoridad, que nombra una comisión de coruñeses para llevarla a cabo, y en el año 1886 abre sus comedores en una antigua panadería de la calle del Socorro, esquina a Sol.

     En ellos y por unos céntimos se atendían las necesidades alimenticias de personas económicamente débiles, parados, refugiados, estudiantes pobres, repatriados, viudas desamparadas, inmigrantes, ancianos enfermos y en definitiva a quienes pasan un mal momento económico.

     Esta Institución Benéfica, cuyos rectores desinteresadamente hacen funcionar, se mantiene con las aportaciones económicas de sus socios, donativos en especie o metálicos y las comidas que sociedades coruñesas celebran en sus locales con asiduidad.

      Los actuales locales, para información, fueron comprados por 35.000 pesetas y son dos casas contiguas, situadas en la calle de Cordelería y Juan Canalejo.

     Durante la Guerra civil 1936–1939 sirvió en sus instalaciones propias a los alumnos de los colegios de Eusebio Da Guarda, de la Plaza de Pontevedra, la cantina escolar, a petición de la tesorería del colegio. Fueron más de medio millar al día de raciones.

      En los años llamados del hambre, desde 1941 hasta bien entrada la década de 1950, se sirvieron 5 millones de raciones, con un gasto total de 3 millones de pesetas. Fue una época de mucha escasez y penuria, ya que escaseaban las materias más necesarias para poder atender a quienes necesitaban comer algo caliente todos los días.

     Don Antonio Lens Viera fue su primer director y fundador, en 1866, quién marcó la pauta de los sucesivos administradores de entidad tan querida por los coruñeses. Recuerdo con verdadera admiración a D. Fernando Suárez, que durante más de cincuenta años, día a día, la presidió. Hoy en manos de un coruñés entrañable, D. Alberto Martí Villardefrancos, sigue su marcha ascendente con nuevas instalaciones de lavandería, duchas y un “punto caliente” donde los usuarios de los comedores, pueden descansar y ver la televisión al amparo de las inclemencias del tiempo.

     Tengo entendido que al principio del funcionamiento de la Cocina Económica se acuñaron unas monedas de latón, con la efigie de la Torre de Hércules en el anverso y en la otra cara "Cocina Económica de La Coruña". De dos y cinco céntimos. No tenían valor real y los coruñeses las adquirían para entregarlas a quienes en la vía pública pedían limosna, siendo válidas para asistir al comedor de la entidad. El Excmo. Ayuntamiento de La Coruña ha reconocido la labor benéfica de la Cocina Económica otorgándole la Medalla de Oro de la ciudad “al cumplir sus primeros cien años” de existencia.

     D. Alberto Martí, recibió y saludó a los Caballeros que, pasadas las dos y media de la tarde, se personaron en el comedor para, como siempre, saborear los riquísimos callos, que no pueden faltar, sabrosos como siempre. La merluza rebozada, con patatas fritas y ensalada. Los entremeses y el postre, todo bien acompañado por vino y refrescos, seguidos del café.

     Dña. María Luisa Cid Castro, Caballero de la Orden, en representación del Excmo. Ayuntamiento de La Coruña, presidió la mesa en compañía del Maestre Sr. Vilasánchez y de D. Alberto Martí que, emocionado, dio las gracias por nuestra presencia y colaboración al recibir del Maestre el talón con el importe de la comida, mas la aportación generosa de la Orden de Caballeros, que un año más y en recuerdo de nuestra heroína María Pita, contribuye a tan benéfica sociedad.

     Un afectuoso saludo.

Maria Rosa Garcia
Alférez Mayor de la OCMP
Vda. de Venancio Lafuente.

 

 

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